Este edificio fue ordenado construir en 1758 por el Conde de Carvalhal como residencia y posteriormente pasó por varios propietarios e inquilinos. En 1883 fue adquirido por el Ayuntamiento de Funchal para servir como casa consistorial, por el crecimiento experimentado por la ciudad, que ha forzado la búsqueda de un nuevo y esta vez ya definitivo emplazamiento de mayor tamaño, para acoger la administración local.
El edificio ha sido objeto de ajustes y modificaciones a lo largo de los años, pero manteniendo su carácter original.
Este palacio es un armonioso ejemplo de la arquitectura de finales del siglo XVIII, que comprende un patio ajardinado interior, revestido de azulejos de Batisttini elaborados en la fábrica de Maria de Portugal en 1940, así como una fuente decorada con una estatua de mármol de «Leda y el cisne», obra de Germano José Salles.
El edificio histórico del Palacio Municipal de Funchal abre sus puertas al público para mostrar sus estancias, historia y rico patrimonio, que podrán ser ahora visitadas de lunes a viernes a las 11.00 horas y cuentan con una duración aproximada de 60 minutos. Las visitas se hacen en múltiples lenguajes.